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El Hacedor de Metáforas…

… a Enar

Sólo él lograba conjurar su magia… cuando hablaba, aun no lo hiciera para ella, era capaz de materializar lo imposible. Era como si tirase de un hilo que yacía dormido, esperando, dentro de su boca y con el, liberase desde su interior una cadeneta de metáforas con la que zurcir los rotos que la vida fue rasgando en su corazón. ¿Te lo imaginas? Las imágenes danzando a su alrededor, como un olor que despierta los recuerdos, para construir con ellas sus más sublimes poemas… ¡libre al fin!, como quien despierta de un sueño de mil años.

#TrancasB

Dos Mariposas danzando libres, como metáforas por los aires.
by desconocido

Sobre mi Corazón y el Tuyo…

(… a L.L.)

Si escribiese sobre lo que hay en mi corazón, terminaría contándolo todo… ¡y no quiero! Como aquella cábala que mal augura los sueños que se cuentan, temo decirnos a los ojos atónitos de un mundo que juzga nuestra locura y la rechaza. Sólo diré que te veía… ¡Cómo te veía! Me detenía en cada detalle que no podía tocar, sino con la lujuria de una mirada triste; con el angustioso anhelo que recién descubríamos, pues aun para nosotros mismo permanecía oculto. Cual avisa extensión de los brazos, cuando las manos no podían tocarse, nos hacíamos  el amor con las palabras. Entonces aprendí que había más de un modo de quererte, de tenerte.
Y ahora temo… temo conjurarlas aquí, en presencia de todos, para ser escrutinadas con recelo y definitivamente mal interpretadas… porque poco importan sus significados, la verdadera magia yace en la voz que las dotaba de vida.

#TrancasB

YinYan

Día de Reyes…

El Caribe Trasplantado

Supo que no vendrían los Reyes cuando intentó rascar el hielo del suelo, en busca de la hierba para los camellos. Aún así, lo durmió la esperanza. – Miranda Merced

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Me levanté con unas brisnas de hierba pegaditas a blusa, rastros de saliva en la cara y una fe pequeña latiendo en el pecho. A pesar de lo que dijo mami, existían y no se habían perdido en la oscuridad. Aunque no me habían dejado nada material sus camellos besaron mi mejilla y ellos velaron mi sueño durante la oscuridad de la noche que tanto miedo me da, como pedí. – Lynette M. Pérez
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Seguían los Reyes la estrella para postrarse ante la belleza de la vida, y llegaron a ti… – Ángel Urbina C.

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Soñé que viajaba por un camino de tierra con altos árboles a los lados, volaba rápido con cierta sensación de ingravidez, a lo largo del camino surgieron unas figuras, figuras que en un principio no reconocí. Me asusté, pero en pocos segundos me di cuenta de que eran gacelas… gacelas que parecían pintadas por el Greco, gacelas muy bellas, y sentí paz, mucha paz y me sentí bien, por fin. ( la magia existe) – Beatriz Mackinlay G.

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Caminando entre campos de flores silvestres, volví al mundo de mí infancia donde todo era de grandes dimensiones y dulces sabores, juegos y cariños sin temor y sin pudor. El pan nuestro de cada día, la gícara de agua y el aroma a lápiz recién pulido; crayolas deslizándose por hojas y hojas blancas, y el olor que dejaban por las tardes los higos del patio de mi casa. De todo ello desperté al sentir sobre mis medias los cardos del atardecer. – Eugenio Rivadeneyra
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¿Por qué reservar a una noche tan solo en medio de trescientos sesenta y cinco días el derecho a la magia, a la ilusión, a la espera, sigo preguntándome? Aún así acompaño en mi nostalgia a Papá y los hermanos a por hierba al campo para los camellos y una bandeja con dulces varios preparado por las fértiles manos de Mamá con tal de hacer de este nuevo intento un canto de esperanza. – Zaida Giles de Quirós

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No había visto los Reyes Mago hasta los 6 años menos 2 días… Mis padres y yo procedíamos de un cortijo. Se mudaron a un pueblo de Valencia unos meses antes. ¡Y allí supe por primera vez de que existían! Yo los ví sobre camellos y con pages. Me llevaron a mi primera cabalgata. Desde entonces y por los regalos que dejaron, creo en la magia de vivir a mis 63 años menos 4 días. – Marisa Bermúdez
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Desconocía la tradición de los reyes, pues el Santo Clo’ era el fuerte en aquel pueblo donde crecí. Si todos los niños sólo pedíamos a Santo Clo’ nuestros regalos pero sabía de los reyes, como aquellos de Oriente que vinieron llenos de Oro y Mirra a ver a Jesús nacido; hasta que papá nos llevó al campo a visitar unos parientes en día de reyes.

Mis hermanos y yo, fuimos por los alrededores a jugar, cuando de pronto divisé una cabaña y me acerqué. Habían niños alrededor de una rústica mesa, ellos al verme me invitaron a pasar, ofreciéndome miel criolla, cajetas de coco y almíbar de papaya del que los Reyes dejaron a su paso por su vieja y paupérrima choza. Ese dia comí las cajetas de coco más ricas en toda mi existencia mientras en mi mente pensaba que aquello era un cuento y una ilusión, que los reyes no podían haber traído tan ricos víveres. Hasta que de pronto, miré tres camellos pastando a lo lejos, mientras los Reyes danzaban alrededor de un fogata .

Ese día conocí la magia de la antigua tradición de los reyes magos. – Dinah Sedivaneb

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Reyes Magos, los ví hoy en el cielo bajo la luminiscencia de la luna redonda cabalgando en sus camellos. Venían de Oriente, pero no pararon en mi casa, siguieron para la de mi nieta y ella saltó de contento porque le dejaron a la hijita de la camella de regalo. Mi nieta la trata con ternura. Por ahora es su bebé-camella. – Julia del Prado

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Yo sí creo en la ilusión! Me levanté y los vi cerrar la puerta del balcón… ¡¡Lo juro por Dios!! – Josep Portell P.

 

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Como estrella que se apaga y aún después de muerta alumbra… así es la ternura. ¡Si lo sabré yo que serví de guía hasta el pesebre! – Orli Peña

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Estrella by Orli Peña
by M. Orli Peña

… y florecen.

 

Se acerca despacio,
saboreando lo dulce de una victoria incierta,
tanteando el terreno a cada paso…
sinuoso
confiado
certero.
No logro ver sus ojos
ni su intención vedada a la distancia,
pero conozco la frase
-antes la escuché de otros labios-.

También conozco de la suavidad
con que se escapan sus palabras, caprichosas…
de la descarga inicial que aterriza sobre la espalda
… y se expande,
de la mixtura de inocencia y descaro
con que te sabe nublar la razón.

En un monosílabo se detienen las aguas,
suspendidas…
a la espera de anegar la lucha que por entero me estremece,
o el más mínimo conato de sublevación
… y aquel espíritu que se traga las palabras, pasa de nuevo.
… y luego el silencio.

Sonríe…
y mis dudas se deshacen en un roce.
Aguarda…
desnudo al fin de intensiones y artilugios.
Los olvidos,
se detienen a jugar entre sus dedos

cuando toca cada nervio del pasado.

Con precisión avanza…  y temo,
a la negrura cercana de sus ojos
a la altivez imponente de su gesto
a sus manos de hombre -inmensas, poderosas-,
al deseo de hacer suyo lo imposible
a la mortal estocada de su beso.

Finalmente, 
su lluvia desciende sobre cada poro dormido
… y florecen.

V. Hayes
©2011

by-asuka-hirose-red
by Asuka Hirose

Y se amaron…

Cerraron los ojos y juntos, desearon con todas sus fuerzas borrar de los anales de la historia tan desafortunado día… como si nunca hubiese ocurrido. Al abrirlos, y como si de una oscura magia se tratase, estaban de vuelta en la cama, desnudos de vergüenzas, una al lado del otro… mientras él le susurraba nuevamente al oído: “hoy he despertado con unas ganas terribles de amarte.”

Trancas Barrancas

by desconocido
by desconocido

Hoxe / Hoy (Gallego)

Que deberei sacar hoxe da chistera,
para trocar en maxia os silencios.
Que alta subirán agora a corda,
que espera
polos pasos deste equilibrista.
Quitarán hoxe a rede?
Quizais para non morrer, só quede caer…
Só existe un modo de sabelo,
camiña… camiña.

***

Qué deberé sacar hoy de la chistera,
para trocar en magia los silencios.
Cuán alta subirán ahora la cuerda,
que espera
por los pasos de este equilibrista.
¿Quitarán hoy la red?
Quizás para no morir, sólo quede caer…
Sólo existe un modo de saberlo,
anda… anda.

Trancas Barrancas

by desconocido
by desconocido